Bienestar animal: consejos para el alojamiento y el ambiente en la crianza de cerdos
Como sucede con cualquier animal de producción, promover el bienestar de los cerdos hace que los animales crezcan más sanos y tranquilos, lo que aporta varias ventajas al porcicultor. Además de cumplir con las exigencias del mercado, la práctica del bienestar animal reduce el costo de operación, aumenta la productividad y garantiza que el producto final sea de calidad, y uno de los puntos cruciales de ese bienestar es el ambiente en el que están los cerdos.
Criar cerdos en espacios que se adecuen a las características de la especie hace que los animales sean dóciles, reduce el número de muertes y lesiones y facilita el manejo de los animales. Por tanto, este tipo de crianza es uno de los requisitos del programa creado por la organización Humane Farm Animal Care (HFAC). Al cumplir con todas las normas del programa, el porcicultor puede utilizar el sello Certified Humane en los envases de los productos derivados del cerdo.
¡Siga leyendo para obtener más consejos que garanticen el bienestar de los animales en aquellos ambientes destinados a la crianza de cerdos!
Comportamiento natural
El ambiente en el que se crían los cerdos debe permitir que estos animales expresen el comportamiento natural de la especie y también evitar que sientan estrés, miedo y molestias físicas o térmicas. El espacio no debe presentar características físicas que causen lesiones a los animales, que no han de estar en contacto con gases tóxicos, pintura fresca, desinfectantes y otros productos químicos.
Vea algunos consejos que ayudan a preservar el comportamiento natural de los cerdos:
– Guarde un registro de las cuestiones importantes sobre la granja: área total, área construida para uso de los animales, número total de cerdos en cuanto a su edad, peso y espacio disponible en los alojamientos, etc.;
– asegúrese de que los cerdos no tienen contacto con las instalaciones eléctricas;
– evite que los animales pasen frío o calor, manteniendo la temperatura del ambiente con la ayuda de una ventilación eficaz y de otros sistemas, atendiendo siempre las necesidades de los cerdos según su edad.
– asegúrese de que se mantiene la buena calidad del aire y que la concentración de amoníaco es inferior a 10 ppm;
– evite la alta densidad animal en los alojamientos: los cerdos necesitan tener un espacio mínimo equivalente a 1,5 veces el área que ocupan cuando se echan y deben poder voltearse y estirar las extremidades con facilidad; y
– proporcione a los cerdos criados en interior el acceso a un área de descanso que tenga una superficie seca y cama de paja o goma para que se echen sin causarles molestias.
Cerdos criados al aire libre
Si el sistema elegido incluye que los cerdos se críen al aire libre, se debe proporcionar un área de descanso cómoda, seca y bien drenada que acomode a todos los animales. Otros cuidados que se han de tener incluyen disponer de un área para resguardarse del viento y la lluvia durante las épocas de frío en invierno y tener acceso permanente a una zona sombreada y a áreas húmedas y con barro cuando hace calor en verano.
Enriquecimiento ambiental
El enriquecimiento ambiental es una herramienta que ayuda a prevenir y minimizar la incidencia de peleas entre los cerdos y que favorece el comportamiento natural de la especie. Cuando los animales tienen acceso a materiales como paja, aserrín, cadenas, cuerdas y bolas, se estimula su curiosidad y tienen ganas de hozar, hurgar, y masticar.
Otro factor fundamental en los ambientes donde se crían los cerdos es que un individuo siempre ha de poder ver, oler y oír a otros animales.
Requisitos para las cerdas reproductoras
Dada la importancia de la maternidad, el ambiente donde se están las cerdas reproductoras debe seguir algunos requisitos específicos, empezando por la necesidad de disponer de un espacio más grande para que estén más cómodas y se evite que los lechones sufran accidentes.
Vea algunos consejos para poder cumplir estos requisitos:
– Las cerdas reproductoras adultas necesitan una superficie de piso total de 3,5 m² por hembra;
– Las cerdas reproductoras primerizas y en su segundo parto necesitan una superficie de piso equivalente a 2,5 m² por hembra;
– El área de descanso debe ser de al menos 5 m² para cada cerda reproductora adulta y 1 m² para hembras primerizas y en su segundo parto;
– Hasta 48 horas antes del parto, se debe proporcionar material para que la cerda construya su nido, que es un comportamiento innato de gran importancia para ellas;
– Los corrales de partos deben disponer de un área de cama -pudiendo ser de paja- que permita que la cerda pueda voltearse libremente;
– Los corrales de parto deben tener al menos 1,8 m x 2,4 m, tener un área protegida para los lechones de al menos 0,8 m² y un área con calefacción. Para evitar que la cerda lastime a los lechones al echarse, la protección lateral debe estar ubicada de 20 cm a 25 cm de la pared con la altura del piso siguiendo esa misma medida.
– Se prohíbe el uso de jaulas tradicionales, rectas y estrechas, durante la gestación y el parto de cerdos.
Requisitos para los lechones
El ambiente de crianza de los lechones también debe seguir unos requisitos específicos en cuanto al espacio mínimo de las camas y el área total disponible para los cerdos. Este espacio se va modificando según crecen los animales.
Consulte todas las medidas que se exigen en el libro electrónico El bienestar de los cerdos en la práctica.
Publicado em 28 abril de 2022