Conozca los mitos y verdades del bienestar animal
Existen todavía muchos mitos y verdades sobre el bienestar animal. En la práctica, obtener el sello de bienestar animal es más simple y accesible de lo que muchos productores se imaginan.
En este libro electrónico, mostramos que el bienestar animal está al alcance de todos aquellos a los que les interesa conquistar un mercado cada vez más exigente y que no tolera el maltrato de los animales de producción, sea cual sea el tamaño de su actividad productiva.
Pero, ¿el sello se aplica a mi propiedad? Sí, la obtención del sello de bienestar animal se encuentra a disposición de propiedades de cualquier tamaño, ya sean pequeñas, medianas o grandes. Sea cual sea el tamaño del productor, lo que importa es su capacidad de organización y adaptación. Además, como ya hemos mostrado aquí, los costos también son proporcionales al número de animales que haya en la propiedad. Hay que tener en cuenta que el costo de la certificación acaba siendo irrelevante ante las ganancias económicas que trae el sello, como la apertura de nuevos mercados.
Otra idea equivocada es que el proceso de certificación es complejo. Por el contrario, las normas de bienestar animal son objetivas y sin complicaciones. En ellas se explica claramente lo que se puede hacer, lo que debe evitarse y las condiciones en las que los animales han de vivir. Se especifica cómo proporcionar comida y agua y qué cantidad es la adecuada para cada especie.
Se explica también cómo asegurarse de que haya un espacio lo suficientemente amplio para que cada animal pueda expresarse de manera natural. Se determina cómo eliminar los factores de estrés e incluso se detallan los cuidados de la salud mental durante la crianza para prevenir enfermedades o tratarlas de la manera correcta, en caso de que surjan. En otras palabras, se trata de asegurarse de que los animales no sufran impactos físicos, psicológicos ni malestar ambiental durante su ciclo de vida.
Publicado em 27 junio de 2019