El bienestar animal mejora los resultados de productores y empresas alimentarias
La preocupación respecto al bienestar animal mejora los resultados en las granjas e industrias de alimentos, resultando en una situación en la que todos ganan.
Primero, los animales crecen sin sufrimiento. Ganan también los consumidores — ya que es más difícil que una empresa de alimentos interesada en mantener estándares éticos en la crianza de animales actúe de modo irresponsable en otros aspectos del negocio. Finalmente, también ganan los productores y procesadores, al abrir un camino más saludable y redituable para sus negocios. Vea tres ejemplos de cómo la salud de los negocios puede mejorar cuando se obtiene un sello como el Certified Humane.
1. Ofrecer una mejor calidad de vida a los animales ayuda a ganar mercado.
Son los consumidores quienes, al final, determinan cómo los procesadores de alimentos y dueños de granjas deben cuidar del manejo de los animales de producción. Ellos exigen cada vez más respeto y una vida digna para los animales criados para consumo humano. Por ello, grandes empresas vinculadas a la cadena de la alimentación, como Unilever, Nestlé y McDonald’s, empiezan a exigir que sus proveedores respeten los estándares de producción considerando el bienestar animal.
Podría creerse que en América Latina esta preocupación respecto a la calidad de vida de bovinos, aves, cerdos y otras especies aún es incipiente. En otros lugares del mundo, como Europa y Estados Unidos, una buena parte del mercado ya no está dispuesta a consumir alimentos preparados sacrificando el bienestar de los animales. Esta es una tendencia creciente, y el mercado latinoamericano no es la excepción. De acuerdo con una investigación realizada en 2013 por el Instituto Akatu de Brasil, 52% de los consumidores dijeron que admiraban a las empresas que garantizan, no existe el maltrato a los animales – se trata de la principal decisión que una compañía puede tomar para atraer la admiración y la preferencia del público, seguida de “buenas relaciones con la comunidad” y “tener sellos de protección ambiental”.
Muchos países imponen barreras comerciales a alimentos y materias primas de origen animal cuya producción no haya seguido estándares rigurosos de crianza. Además, grandes compañías de alimentos con sede en el exterior ya están incrementando las exigencias a sus proveedores en América Latina. Aunado a ello, existe la necesidad de darles explicaciones a los inversionistas en sus países de origen.
Por ejemplo McDonald´s, quien recientemente anunció que dejará de comprar carne de cerdo de granjas que no adopten una práctica fundamental para el confort de las cerdas reproductoras en América Latina. Las cerdas reproductoras son las cerdas que paren a los cerditos posteriormente engordados en granjas: la sustitución de jaulas de gestación por sistemas de alojamiento en grupo, y jaulas de maternidad por corrales, donde las cerdas tienen más espacio para expresar más de su comportamiento natural, caminar interactuar con otras cerdas, dar a luz y amamantar a los lechones. Otras grandes compañías siguen en la misma dirección. BRF, empresa brasileña con marcas como: Sadia, Perdigão y Qualy, también ya se comprometió a eliminar el uso de jaulas de gestación en su compañía y sus proveedores. Nestlé empezó, aproximadamente hace dos años, con un programa global de bienestar animal. Unilever tiene el objetivo de garantizar el bienestar de los animales que dan origen a los ingredientes de sus principales productos, como los huevos utilizados en la mayonesa Hellmann’s. Sólo por mencionar algunos ejemplos.
¿En este escenario, a quién le gustaría arriesgarse a perder un gran cliente o dañar su imagen ante el segmento más consiente de los consumidores?
2. Animales bien cuidados hacen que su negocio sea más eficiente y productivo
Hay una cuestión relativamente común: ¿La producción de animales, alineada con las buenas prácticas del bienestar, no resultaría en pérdidas en la producción? Puesto que, a primera vista pareciera que los productores podrían perder al restringir el número de animales por metro cuadrado, aumentar los gastos con ración para garantizar comida suficiente y tener mayores gastos energéticos al adaptar la temperatura de las granjas y aviarios para el confort de los animales. No es así. La actividad, lo comprueba la experiencia, se torna aún más productiva. Productores de ganado lechero, por ejemplo, obtienen una mayor producción de leche. Las vacas responden positivamente a un ambiente más saludable — de modo contrario: entre más estrés, menos leche producen.
Con los bovinos de carne no es diferente. Malas condiciones de crianza, confinamiento, transporte y sacrificio aumentan el número de hematomas y heridas en los animales — y la carne lastimada debe ser descartada, provocando pérdidas y disminuyendo los ingresos. La mortalidad de aves y cerdos también cae considerablemente cuando las granjas no proporcionan un ambiente con espacio, iluminación, alimentación y agua suficiente para cubrir las necesidades de los animales.
3. Los consumidores están dispuestos a pagar más a los proveedores de alimentos que no maltratan a los animales
Una buena parte de los consumidores rechaza alimentos cuya producción implicó maltrato a los animales. La buena noticia: esos mismos consumidores están dispuestos a pagar más por carne, leche y huevos producidos con bienestar animal. Ello no ocurre sólo en los países más desarrollados, de acuerdo con un estudio reciente realizado por un grupo de investigadores brasileños, liderado por el profesor Celso Lemme, de la escuela de negocios carioca Coppead: casi un tercio de los entrevistados afirmó, inicialmente, estar dispuesto a pagar un adicional superior a 40% por el producto de proveedores certificados en bienestar animal. Ese porcentaje crece cuando las personas reciben más información: después de responder a la primera pregunta, los investigadores presentaron un vídeo mostrando escenas de algunas prácticas crueles con animales, desafortunadamente todavía comunes en muchas granjas. Posteriormente, los consumidores dispuestos a pagar un aumento en el precio del producto aumentó cerca del 50%.
Como puede ver, hacer lo correcto puede ser un excelente negocio.
Publicado em 22 agosto de 2017