La industria agrícola no se detiene y mantiene el suministro durante la crisis del Coronavírus
Sin comida no hay desarrollo. Por eso, los productores agrícolas y ganaderos están trabajando enérgicamente para evitar la escasez de alimento en las ciudades durante la crisis del Coronavírus. Como ya hemos mencionado en una publicación anterior, algunas empresas certificadas con el sello de bienestar animal Certified Humane en América Latina nos han comunicado que ha habido un aumento en los pedidos de sus productos, especialmente en el mercado de huevos y pollos.
Este panorama de pandemia —declarada por la OMS— ha afectado no solo la rutina diaria de las actividades agrícolas y ganaderas, sino todos los sectores de los países que se han visto afectados por el COVID-19, con el cierre de negocios en todos los segmentos, ya sean pequeños comerciantes, turismo, eventos, construcción civil, entre otros muchos. El sector agrícola y ganadero —de crianza de animales de producción o plantas procesadoras de alimentos que utilizan materia prima animal— ha demostrado unidad y continúa con su estructura productiva. No debemos olvidar que el suministro también está siendo posible gracias al esfuerzo y la dedicación de los camioneros.
Cuando la sociedad atraviesa una crisis como la del COVID-19, u otra que tenga que ver con problemas de salud pública, se tiene muy en cuenta la calidad de los alimentos que se compran para el consumo doméstico. En momentos como este, los productos certificados adquieren aún más relevancia. El consumidor empieza a buscar artículos que son seguros y que garantizan la salud de su familia, lo que demuestra su madurez a la hora de comprar.
La prioridad es el bienestar animal
Los productores chilenos de Colun (Cooperativa agrícola y lechera de la unión) también han adoptado las medidas preventivas básicas de seguridad recomendadas. No se ha efectuado ningún cambio en la rutina con los animales, puesto que el objetivo principal es mantener los procedimientos de bienestar de las vacas lecheras. En cuanto a los trabajadores, se les ha indicado que mantengan distancia entre ellos y que no trabajen en grupo. También ha habido cambios en los turnos para que solo haya un trabajador en cada área. No se permite la entrada de vehículos externos en la propiedad, con la excepción de los camiones para el transporte de leche.
En algunas granjas, los productores han instalado lugares con amonio cuaternario para la desinfección del calzado y otros han creado un plan de contingencia en caso de que se enferme algún miembro del equipo. Además de intensificar la limpieza y la higiene (agua, jabón y alcohol 70%), el uso y cambio frecuente de guantes, el cuidado especial con los delantales y EPIs, un productor ha descrito la crisis del Coronavírus como algo que los ha unido más —se preocupan los unos de los otros y están agradecidos por lo que tienen: la vida en el país y la posibilidad de disfrutar del aire libre.
Una carrera impulsiva a los supermercados
El miedo a la escasez de alimentos ha hecho que muchas personas vayan impulsivamente a los supermercados para asegurarse de que tendrán comida en casa para varios días. Como resultado, los productores de huevos, por ejemplo, han recibido más pedidos de los distribuidores. Esto es lo que le ha pasado a Catalina Maino, de la granja Gallina Feliz, que también ha visto las largas colas en las tiendas de Santiago de Chile, algo que no sucede normalmente. Todo su equipo ya se ha vacunado contra la gripe, usa máscaras y desinfecta el local frecuentemente. Una ventaja del aviario es que ya está ubicado en un área más aislada y los trabajadores viven cerca.
El responsable de la granja peruana La Calera, Erick Olivas, ha señalado que la crisis del Coronavírus no ha afectado su producción, sino que ha notado un consumo de huevos mayor por parte del público en general. Debido a la situación actual, está trabajando solo con el personal necesario —todos menores de 50 años— y cumpliendo con las medidas que recomienda la Organización Mundial de la Salud. Por su parte, Tecnovo S.A., la empresa argentina especialista en el procesamiento de huevos, ha continuado con su ritmo de producción, a pesar del aislamiento de algunos trabajadores. El veterinario Eduardo Godano asegura que es casi imposible detener las actividades en este sector de producción.
La producción de la empresa brasileña Mantiqueira Alimentos continúa a toda máquina para garantizar entregas y suministros en los mercados. Según André Carreira Carlos, se ha creado un comité de contingencia para monitorear el progreso del COVID-19 y acelerar el proceso de adopción de las medidas que recomiendan los organismos de salud. Entre las acciones que se han tomado están la suspensión por tiempo indefinido de desplazamientos entre las unidades de producción, las visitas de clientes y proveedores, los cursos de capacitación y las entrevistas.
Tiempos de innovación incluso en el ámbito rural
La producción rural, tradicionalmente, no posibilita el teletrabajo por razones tan obvias como el manejo compasivo de los animales. Esto ya era así antes de la crisis del Coronavírus. El director de la también brasileña Planalto Ovos, Daniel Mohallen, ha declarado que, al haber algunas personas del centro de clasificación de huevos teletrabajando, se han tenido que buscar soluciones que se muestren lo suficientemente prácticas y que han de continuar en funcionamiento. Además, se ha creado un comité de atención para orientar a los trabajadores y hacer un estudio detallado de los riesgos. Todas las medidas adoptadas han tenido en cuenta los aspectos del bienestar animal y la continuidad del suministro de alimentos a los clientes.
Los horarios y la rutina de los trabajadores de la granja han cambiado: se han tomado medidas para intensificar los hábitos de higiene y distanciar a las personas, como cambiar los horarios de trabajo y comidas, prohibir las visitas a las viviendas y restringir las idas a la ciudad. Algunos empleados han sido apartados de su trabajo por pertenecer a los grupos de riesgo y los trabajos que realizaban se han redistribuido entre los demás. “A pesar de ello, todos se han mostrado bastante comprometidos y entienden que se están tomando estas medidas para preservar la salud”, explica.
El uso de videoconferencias para reuniones que se harían en persona y los cursos de capacitación realizados en lugares abiertos han sido algunas de las medidas que ha adoptado Granja Faria en Brasil. También se le ha permitido al equipo administrativo que teletrabaje para realizar sus funciones. Otras medidas de higiene que están en la lista de normas adoptadas son el cambio en los horarios para evitar aglomeraciones y el uso de cuaternario de amonio para la desinfección.
Publicado em 09 abril de 2020